El circo callejero.

Es común encontrar en las calles del centro de Brisbane artistas callejeros de todo tipo que le dan color y sabor a la calle por unas monedas. Hemos visto violinistas, saxofonistas, payasos, mimos y acrobatas. La calidad de los shows y "conciertos" en general es muy buena y vale la pena detenerse unos minutos para apreciarlos.

Hace un par de semanas mientras paseabamos, nos tocó presenciar un espectáculo cómico circense de un sólo hombre. Además de disfrutar de las habilidades de este Show-Man callejero, Daguito y yo fuimos seleccionados como ayudantes.

A Daguito le tocó pasarle unas espadas cuando pasaba a toda velocidad en su mini-bicicleta.

Después de tomar las espadas, ejecutó un acto de malabarismo sobre ruedas.

Al ser el "más robusto y fuerte" de los voluntarios, a mi me tocó cargar a "Ian" en los hombros para que se subiera a su gran monociclo.

Como acto final, le arrojé sus espadas desde unos 5 metros para que volviera a hacer malabares. Con mi pulso maraquero, el peligro para la audiencia era inminente.

Durante los 20 minutos que duró el acto, participamos como patiños de sus bromas. Daguito se lució con su inglés frente a una gran audiencia!

Fue una experiencia muy divertida. Para Daguito además resultó un buen negocio. Como recompensa a su esfuerzo,  el  artista le cedió $5 dólares australianos de las aportaciones que recibió del público.

Estoy pensando seriamente en cambiar de profesión si no encuentro trabajo pronto. Aprovechando mis "habilidades" de Mago, un show tipo Beto el Boticario podría ser nuestra empresa familar. Nada más convenzo a Gaby de que a ella le toca interpretar el papel de Gina Montes y tenemos nuestro camino seguro hacia el Australian Dream!